A veces me pongo triste al pensar que no estoy contigo, pero después cuando reflexiono, me doy cuenta de que estoy mejor sin ti, porque no me haces ningún bien. Otras veces me pongo triste porque veo la lluvia caer desde mi ventana y no tengo a nadie con quien darme un beso bajo ella. Y otras veces simplemente estoy triste porque no estoy feliz. Simplemente porque me gusta la tristeza, porque es bonita y cuando la noche comienza, es la que mejor me besa. La tristeza siempre me recuerda a todo lo que debimos hacer y no hicimos. Y a lo que hicimos pero no debimos hacer. Total, que debimos querernos un poquito mejor y rompernos un poquito menos. Pero bueno, ahora ya da igual. Me da igual que me olvides. Pero no te olvides de que un día fuimos. O que más da, olvídate si quieres. Y al final no vives por el amor, pero tampoco mueres porque aprendes a vivir con ello (y joder qué putada). Y que venga de una jodida vez Septiembre, que no te voy a echar de menos. Que prefiero que me destroce la rutina a ver como te alejas cada vez más. Y es que al final ya no sé si querer olvidarte u olvidarme de quererte. Al final eso se queda en un "Olvidarme." ¿Cuántas veces me habré olvidado ya de mí misma? Unas 1.788.962.698.848.417 o así más o menos. Después pienso en cuando me sonrías, lo bonito que será (la vida, digo, eh). Y joder, ya sé que podría haberme enamorado mejor, pero ya sabes que nunca nunca nunca podría haberte querido más. Y no sé qué es eso de "No es olvidar, sino recordar sin que duela" ya que los recuerdos están hechos para hacer daño. Para hacer destrozos. Porque los recuerdos siempre vienen cuando estás apunto de olvidar, cuando estás apunto de pasar página. Qué inoportunos, los cabrones (e impuntuales). Ojalá nunca sepáis de qué hablo. Y con eso me refiero al jodido infierno que supone irse a dormir todos los días sin nadie a quién decirle que le quieres. Aunque es bonito escribir sobre toda la gente que no tuvo el valor suficiente como para quererse (ni bien ni mal, de la mejor forma que sabían) porque si lo hacían, la noche siguiente tendrían que escribir cosas tristes (y ahora mismo no sabéis de qué hablo, pero es triste). Que no te quiero pero sigo escribiendo nuestros nombres en el vaho de los cristales, ¿me entiendes? No estamos perdidos, simplemente nadie nos busca y estamos esperando a algo que no va a ocurrir. Que yo soy la primera que dice no esperar nada, pero no espero nada, y aún así no dejo de esperar. Y el tiempo pasa lento. Y se hace largo. Y por más mentiras que me digo, sé que a él le he dicho unas cuantas más. Todo queda en finales que se disfrazan con un "después." Al final ya, no inicio conversaciones porque no sé cómo voy a terminarla y no sé, ya dejo demasiadas cosas en manos del destino, paso de que me joda más, porque si puede acabar mal, acabará mal. Porque si algo puede salirme mal, me saldrá mal (o fatal, si cabe la posibilidad). Es gracioso porque ni lo que pienso, ni lo que digo se miran a la cara y es así es como vivo la mitad, porque estoy en medio y me desgasto. Y es que eres mi cigarro favorito, ya lo sabes. Te consumo y me consumes, me haces daño y no te dejo. Y... ¿cuándo dejaré de ser tan gilipollas? Ya sé que tengo que alejarme de los monstruos que no me han dejado ver, ¿pero sabes? Me gusta romperme en mil pedazos otra vez, cada noche, para (no) dormir cuando no estés, también sé que tengo que alejarme de los monstruos que no me han dejado de ver, pero ya no tengo a nadie que los mate por mí, así que prefiero que me coman. Porque ya me da(s) igual.
Adiós. Yo no disfrazo nada (Exceptuando las lágrimas. Me gusta disfrazarlas de sonrisas). Y bueno ese "me gusta" en fin, es más la necesidad que otra cosa.
Aunque llegues siempre tarde, yo siempre estaré esperándote.
viernes, 30 de agosto de 2013
viernes, 9 de agosto de 2013
¿Cuánto dura un "después"?
No sé cómo empezar ésta entrada. Tampoco sé qué quiero escribir ahora mismo. Así que voy a improvisar un poco ya que hoy pinta noche de insomnio. Ya sabéis quién es éste insomnio, ¿no? He de deciros que por fin he descubierto a qué se debe éste insomnio, pero prefiero dejaros un poco intrigados y decíroslo después. "Después" ¿Os habéis dado cuenta? Esa frase la he acabado con un "después." Vaya, ni me había percatado del significado "después". ¿Cuánto dura un "después"? ¿Una hora? ¿Un día? ¿Cuánto? A veces una eternidad, ¿no? Sólo pretendo que reflexionéis y penséis en todos los "después" que os han dicho y no han llegado (todavía).
"Después hablamos, ¿vale?"- (Me dijo hace cinco meses).
Aunque si tengo que analizar todo lo que me dijiste... Podría empezar con los "Para siempre." Que sinceramente, ahora los veo una gilipollez. ¿Para siempre? Como si algo fuera eterno. Como si algo durara infinitamente. Ya podéis reíros. Que cada vez que me dicen "Para siempre" nunca duran suficiente.
Y ahora que estáis leyendo ésto de los "para siempre" seguro que habéis pensado en alguien que ya no está a vuestro lado. Y posiblemente esa persona sea vuestro insomnio. Y posiblemente esa persona esté rondando por vuestra cabeza todos los días.
La vida está llena de misterios y cada palabra, si la analizas es un puñal. Y como todos son misterios y miles de "cómo's" "cuándo's" y "por qué's" sin resolver, prefiero dejaros con la duda y ya más adelante os diré el porqué de mi insomnio.
miércoles, 7 de agosto de 2013
Que fuimos cobardes y demasiado fugaces.
Y romperme cada noche porque no estás a mi lado. Y joder cómo duele cuando abres las cicatrices que ya estaban cerradas. Y lo siento por no poder pagarte el alquiler de tus costillas. Lo siento por echarte de menos todos los putos días. Lo siento por sonreír cuando me hablas... ¡Lo siento, lo siento y lo siento! De verdad que siento quererte tanto. Y tanto que lo siento... Siento como me muero cada día por ti, siento como me voy consumiendo, siento como... ¿Pero qué más da lo que me pase a mí? ¿Qué más da cómo me sienta o lo que sienta? Y joder chico, cómo la lías con tus idas y venidas, con tus "te quiero" y ahora no me mires, con tus "eres mía" pero paso de tu culo. Y que yo por ese cabrón me partí la boca más de cien veces (y no me arrepiento) y lo más triste es que me la partiría cien veces más. Y tío, ¿no te das cuenta? Que estamos perdidos.
Estamos perdiendo.
Perdiéndonos.
¿No ves que aunque huya de ti siempre vas a estar dentro de mí? Siempre vas a llegar tarde, pero... ¿qué más dará? Yo siempre voy a estar esperándote.
esperándome.
esperándonos.
Y si lo hago es porque pienso que en el fondo todavía hay algo. Pero... ¿Acaso hay solución a éste vacío? Supongo que fuimos cobardes y demasiado fugaces.
ESPERO QUE LA PRÓXIMA VEZ SEAS MÁS VALIENTE Y TE SUELTES.
ESPERO QUE HAYA PRÓXIMA VEZ. O QUIZÁS NO. AÚN NO TE HE DICHO QUE NO HABRÁ PRÓXIMA VEZ.
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)
.jpg)
.jpg)